Un reciente informe del Instituto para la Gestión, Administración y Vinculación Municipal (IGAVIM) ha revelado una alarmante falta de preparación en el estado de Veracruz: solo 41 de sus 212 municipios cuentan con un Atlas de Riesgo actualizado. Este documento es crucial para identificar zonas de riesgo y amenazas potenciales, y su ausencia en el 80% de los municipios representa un grave peligro para la seguridad de sus habitantes.
El informe titulado “¿Cómo vamos con los Atlas de Riesgo en México?” destaca que, en comparación con 2023, la cifra de municipios veracruzanos con atlas de riesgo ha aumentado mínimamente, pasando de 39 a 41. Esta leve mejora subraya la falta de avances significativos en la gestión de riesgos en la región.
Municipios Preparados vs. Municipios en Riesgo
Entre los municipios que han cumplido con la actualización de su Atlas de Riesgo se encuentran Fortín, Poza Rica, San Andrés Tuxtla, Tezonapa, Chiconquiaco, Chontla, Córdoba, Xalapa, Huiloapan de Cuauhtémoc, Coscomatepec y Zongolica. También están Alvarado, Martínez De la Torre, Tlacotalpan, Agua Dulce, Álamo, Alpatláhuac, Amatlán de los Reyes, Ángel R. Cabada, Atzacan, Ayahualulco, Chocamán, Coatepec, Coatzacoalcos, Ixhuacán de los Reyes, La Antigua, La Perla, Lerdo de Tejada, Nogales, Oteapan, Pánuco, Río Blanco, Tempoal, Vega de Alatorre, Xico, Las Choapas, Minatitlán, Tlapacoyan, Coatzintla, Boca del Río y el puerto de Veracruz.
La situación contrasta drásticamente con el 80% restante de municipios que no cuentan con esta herramienta esencial. Esto significa que 171 municipios veracruzanos operan sin una guía clara para enfrentar desastres naturales o emergencias, exponiendo a sus habitantes a riesgos innecesarios.
Comparativa Nacional
A nivel nacional, únicamente los estados de Guanajuato y Estado de México han cumplido al 100% con la actualización de sus Atlas de Riesgo. Este cumplimiento total destaca aún más la deficiencia en Veracruz, donde la falta de atlas actualizados podría resultar en graves consecuencias en caso de desastres naturales.
La ausencia de Atlas de Riesgo actualizados en la mayoría de los municipios veracruzanos es una señal de una falta de prioridad y de recursos destinados a la gestión del riesgo y la protección civil. La planificación y la prevención son elementos clave para mitigar los impactos de los desastres naturales, que en regiones vulnerables como Veracruz, son frecuentes y devastadores.
El hecho de que solo una pequeña fracción de los municipios esté adecuadamente preparada refleja una necesidad urgente de acción por parte de las autoridades estatales y municipales. La implementación de Atlas de Riesgo no solo es una cuestión de cumplimiento burocrático, sino una herramienta vital para la seguridad y el bienestar de la población.
La falta de estos documentos deja a muchas comunidades expuestas a inundaciones, deslizamientos de tierra, huracanes y otros desastres naturales sin una estrategia clara para minimizar los daños. Esto pone en riesgo no solo la infraestructura, sino también la vida de miles de personas.
Es imperativo que el estado de Veracruz tome medidas inmediatas para corregir esta deficiencia. La inversión en la creación y actualización de los Atlas de Riesgo debe ser una prioridad para garantizar la protección y la resiliencia de sus municipios ante futuras amenazas.




