Este sábado 24 de agosto, en la entrada principal de Casa de Cultura “Aurora Ferat de Zamacona”, autoridades municipales, grupos culturales, damas voluntarias y sociedad civil, rindieron homenaje póstumo y de cuerpo presente a la señora María de los Ángeles Suárez Roca viuda de Carreón, conocida cariñosamente como “Doña Maruca Suárez”, eminente cosamaloapeña que por décadas contribuyó al engrandecimiento cultural, político y social.
Nacida en Cosamaloapan un 27 de agosto de 1923 y acaecida a los 95 años el 23 de agosto del 2019, “Doña Maruca” será recordada por todos los tiempos y generaciones por el gran legado que deja por su paso en esta vida. Hablar de María de los Ángeles Suárez Roca, es hablar de una persona y una gran mujer cuyo nombre se escuchará en las reseñas históricas que enmarcan este municipio de la Cuenca del Papaloapan y su desarrollo, sobre todo en el ámbito de la cultura.
Esposa y madre ejemplar; inquieta, altruista e innovadora como personaje de su tiempo, cuya actividad marcó toda una época del Cosamaloapan del siglo XX, anacrónica en muchos aspectos pues fue una mujer adelantada a su tiempo, empoderada y emprendedora cuando el género femenino adolecía de grandes rezagos y se encontraba confinado al hogar o a la sombra del varón, pero Doña Maruca en vida rompía todos esos modelos de conducta.
Esposa del farmacéutico Antonio Carreón Bravo, su compañero de vida y con quien procreó a María de los Ángeles Carreón Suárez, deja un legado de grandes batallas en pro del bien común pero también una gran trayectoria de lucha en la promoción cultural. Su legado destaca grandes hazañas como la creación del Club Rotario y cuyas acciones a través de eventos de beneficencia como “La Jarochada” y el baile “Blanco y Negro” permitían ayudar a los más necesitados; de igual manera y rodeada de grandes damas y caballeros como don Antonio Carreón , Rafael Arriola, Ángel Estrada, Aurora Ferat, Cipriano Villasana, entre otras más formaron parte del apoyo humanitario a los afectados de la inundación en 1944, episodio que marcó la vida de la Cuenca del Papaloapan próxima a cumplir 75 años.
Primera Dama y Regidora dentro del ramo de la educación y la cultura, quien con un grupo de damas cosamaloapeñas, lograron en 1977 que al antiguo recinto de la escuela “Luis A. Beauregard” se convirtiera en la Casa de Cultura de esta ciudad, edificio de la primera mitad del siglo XX que gracias a ella fue donado para este fin, la Casa de Cultura con la que hoy cuenta Cosamaloapan de Carpio y Fentanes; y que en este preciso lugar se despida con los honores que merece.
Este homenaje póstumo, fue encabezado por el alcalde Raúl Hermida Salto, su esposa y presidenta del DIF Municipal, Liz Moreno Azamar, así como también el regidor Víctor Manuel Bonilla Ramón, el director de Casa de Cultura, Jaime Loyo, grupos culturales y sociedad civil; donde la maestra Margarita Azamar Fentanes declamó una hermosa poesía en honor a esta gran mujer altruista, fundadora de Casa de Cultura y dedicada a la promoción de la cultura en Cosamaloapan.
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