Alertan sobre posible cierre de laboratorios si fracasa compra consolidada

La Asociación Mexicana de Laboratorios Farmacéuticos (Amelaf), que agremia a 41 laboratorios instalados en el país —casi la mitad de ellos en Jalisco—, advirtió sobre el riesgo de que algunas empresas productoras de fármacos pudieran desaparecer si fracasa la licitación para la compra consolidada de medicamentos y material de curación para el 2020.

El director ejecutivo de Amelaf, Juan de Villafranca, dijo a El Economista que la compra consolidada es un tema fundamental para los laboratorios mexicanos, toda vez que surten aproximadamente 50% de todas las piezas que compra el gobierno.

“El riesgo es que si lo hacen mal va a haber laboratorios que van a quebrar. Sí está en riesgo la vida de los laboratorios” y, por ende, el empleo que generan, destacó el director ejecutivo de la asociación.

Tan sólo los laboratorios socios de Amelaf generan 35,000 empleos directos, la mayoría para profesionistas, y sus niveles de salario, según De Villafranca, “están muy por encima de cualquier otra actividad”. Comentó que en este sector el principal cliente es el gobierno, a quien se vende la mitad de la producción.

De acuerdo con el directivo, si la licitación vuelve a salir mal, como la realizada a mediados de este año, en la que 62% de las claves, equivalente a 1,923 productos, se declaró desierto, el gobierno federal tendrá que recurrir a compras directas con el riesgo de un desabasto. “A los laboratorios les lleva aproximadamente cuatro meses fabricar un medicamento. Entre que se importa la materia prima, se hacen pruebas de estabilidad, se fabrica, y pruebas de estabilidad nuevamente, estamos hablando de un proceso mínimo de cuatro meses, en algunos casos hasta seis”.

Para los integrantes de la asociación, la licitación para la compra consolidada 2020 debe corregir aspectos fundamentales que causaron el fracaso del proceso anterior.

“Primero, los precios máximos de referencia eran muy bajos, había medicamentos donde ni siquiera alcanzaban a cubrir los costos de producción. Segundo, los temas de pagos y puntos de entrega no estaban muy precisos, y obligaban al laboratorio a comprometerse a surtir 100% de una clave.

“El tema de medicamentos y el tema de salud son un factor de estabilidad social y de desarrollo”, destacó Juan de Villafranca, tras indicar que, por tanto, se trata de un tema de seguridad nacional.

“De los laboratorios mexicanos, de la capacidad instalada, se está utilizando únicamente 55%, y con eso surtimos la mitad de los medicamentos al Estado”, señaló.

El Economista