Frente a los números rojos que obtuvo Petróleos Mexicanos (Pemex) en su tercer reporte trimestral del año es urgente que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador haga un replanteamiento de la política energética de México porque podrían generar un contagio y golpear a la estabilidad financiera del país, pugnó Gustavo de Hoyos, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
El líder de la Coparmex advirtió que las cifras negativas de las empresas energéticas del estado obligan a cambiar de timón, pues “son altamente preocupantes”. Por ello, el líder patronal propuso integrar una rotación de directivos, tanto de la petrolera como de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y “abrace” a la inversión privada para retornar las rondas de fracking.
Entrevistado posterior al asistir a la Universidad del Valle de México (UVM), De Hoyos dijo: “hacemos un llamado respetuoso al presidente para que haga un replanteamiento integral de la política energética, es claro que dicha política como se planteó nos está conduciendo a un desastre total”.
Esto luego de que Pemex registró pérdidas de hasta siete veces más durante el periodo de enero a septiembre del 2019, comparado con igual lapso del 2018. Esto significa que la petrolera mexicana ha perdido 176,000 millones de pesos, cantidad superior al presupuesto de la refinería de Dos Bocas.
El Economista




