Pese a presión del gobierno, las pymes no podrán sostener su planta productiva sin más apoyos

Sin ventas no hay dinero, sin dinero no hay ganancias y tampoco liquidez para pagar la nómina de los trabajadores y, bajo este panorama, es imposible mantener la planta productiva de la empresas, sean pymes o de gran tamaño. 

Aunque el gobierno federal ha advertido que es ilegal el despido de empleados en medio de la emergencia sanitaria decretada el pasado 30 de marzo, para las pequeñas y medianas empresas resultará casi imposible sostener a su personal, advierte María Fernanda Garza Merodio, presidenta de la International Chamber of Commerce (ICC) capítulo México.

No es un tema de legalidad, por supuesto que sabemos que tenemos que cumplir con la Ley Federal de Trabajo que no te permite reducir el sueldo de tus empleados o despedirlos sin indemnización, los empresarios están tratando de mantener a sus trabajadores pero va a llegar momento en que no va tener el flujo para pagarles y se van a ir todos a su casa y el mismo empresario va a regresar con la esperanza de volverla a abrir pero muchos empresarios ya no van a poder”, apuntó en entrevista con Forbes México. 

Las medidas anunciadas por Andrés Manuel López Obrador para rescatar la economía el pasado domingo incluida la entrega de créditos de 25,000 pesos a pequeños negocios presentada ayer, son insuficientes y únicamente se enfocan en los micronegocios, advierte la presidenta del ICC. 

“La economía formal es la columna vertebral del país  y no podemos desmantelarla, alrededor del 70% de los trabajadores formales están en las mypimes y no son las empresas que el presidente está viendo de un changarro de cinco trabajadores, son empresas que forman parte de las cadenas productivas del país”. 

Además, plantea que el gobierno debería asumirse como un mediador entre empresas y empleados para poder integrar un gran dialogo social y que todos asuman las consecuencias de la pandemia. 

Por ejemplo, señala, que en Costa Rica se aprobó una ley para disminuir los horarios laborales de los trabajadores pero también sus salarios con el objetivo de que las empresas cuenten con liquidez para seguir sosteniendo los empleos. 

“Este es un muy buen ejemplo, este dialogo social que todas las partes entiendan la gravedad de la situación y que todos cargan el peso de las medidas que hay que tomar para atravesar periodo de contingencia, en países como México y Ecuador  en donde no se reparte la carga entre los tres sectores es muy difícil que la economía del país y la estructura social se mantenga durante la contingencia”, explicó. 

Además apuntó a medidas como las integradas por Chile en donde se postergaron por tres meses los pagos por Impuesto Sobre la Renta (ISR) y el Impuesto al Valor Agregado (IVA). 

“En toda América, muchos países latinoamericanos que están en peores circunstancias han implementado estimulo fiscales, han diferido impuestos, han reducido la carga tributaria pero sobre todo han promovido el diálogo social entre trabajadores, gobiernos  y empresarios para encontrar solución conjunta al problema”. 

Por ello hizo un llamado al gobierno de López Obrador a reconsiderar la integración de este tipo de medidas. 

Forbes