La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, reconoció que los grupos del narcotráfico y la delincuencia organizada reclutan a mujeres como informantes, pero también como esclavas sexuales.
“Lamentablemente ya están siendo cooptadas las mujeres como ‘halcones’ del crimen organizado. Las jovencitas. Y no sólo eso, porque las enganchan también en la droga, les dan pastillas de muchos tipos para poderlas involucrar más y cooptar más, ya sea en esas actividades ilícitas, como son, desafortunadamente, ser ‘halconas’, o bien, lo peor: llevárselas como esclavas sexuales en un tema de trata (de personas). Primero las convierten drogadictas”, aseveró.
Durante una videoconferencia del Grupo Interinstitucional de Estrategias contra las Violencias de Género, Sánchez Cordero dijo que en el combate a la violencia contra las mujeres “estamos en una situación muy delicada”.
Por su parte, la titular del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Nadine Gasman, expuso que ese organismo ya ha recibido solicitudes de apoyo por parte de mujeres que desean abandonar a grupos delictivos.
Sin precisar un número exacto de cuántas mujeres han requerido ese apoyo, la funcionaria aseveró que han sido pocas, “no muchas”, y mencionó que se les ha brindado atención.
“En esas circunstancias resulta indispensable sacarlas, llevarlas a refugios y ponerlas a resguardo, porque su vida está en peligro inminente; entonces, sí se acercan y sí se les atiende”, mencionó.
Por otra parte, la Secretaría de Gobernación y la Presidencia de la República anunciaron un hackathon que se celebrará en julio para recabar propuestas que permitan al gobierno federal mejorar la atención a la violencia contra mujeres, niñas, niños y adolescentes.
Ante el crecimiento de los casos de violencia intrafamiliar, e incluso del feminicidio, la secretaria Olga Sánchez Cordero dijo que el hackathon permitirá evaluar el impacto real de las políticas de gobierno.
En tanto, Segob publicó su Programa Sectorial derivado del Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024. Ahí, la dependencia admitió que sigue vigente la violación grave a los derechos humanos, como la violencia feminicida y la desaparición de personas.
