La fatídica STS-107

Eric Rosas

La década de los ochenta del siglo pasado trajo consigo el inicio de uno de los programas espaciales más exitosos que hasta ahora ha impulsado la humanidad. Sucesor de los programas Mercury, Gemini y Apolo, el Sistema de Transporte Espacial (STS por Space Transport System) consistía en la construcción de vehículos espaciales que pudieran orbitar la Tierra y fueran totalmente reutilizables.

El programa STS inició luego del éxito alcanzado por el programa Apolo en su llegada a la Luna en 1969, aunque fue hasta mediados de los setenta cuando se terminó la construcción de los primeros prototipos. El Artículo de Pruebas Estructurales 099 (STA-099 por Structural Space Article) y el Vehículo Orbital 101 (OV-101 por Orbital Vehicle), denominado Enterprise, sirvieron para realizar pruebas de resistencia estructural, y maniobras de aproximación y aterrizaje en vuelos dentro de la atmósfera terrestre, respectivamente.

Los STS estaban conformados por el Vehículo Orbital, coloquialmente conocido como Transbordador Espacial, que iba montado sobre un enorme tanque externo de color naranja flanqueado por dos cohetes propulsores. Los STS sólo resultaron parcialmente reutilizables pues, mientras que los cohetes aceleradores sí podían usarse sin reparaciones luego de que eran recuperados tras su caída al mar, el tanque externo requería de una rehabilitación exhaustiva.

Se construyeron cinco transbordadores espaciales funcionales: Challenger – resultante de la modificación del OV-099 –, Columbia (OV-102), Discovery (OV-103), Atlantis (OV-104), y Endeavour (OV-105). Fue el Columbia el primero que realizó una misión orbital en 1982, luego de haber llevado a cabo cuatro vuelos de prueba en 1981. En su conjunto, el programa STS llevó a cabo 135 misiones que acumularon más de 722 días y 19 horas de vuelo. En ellas lanzaron desde la órbita terrestre al Telescopio Espacial Hubble, así como a varios satélites y sondas espaciales. También realizaron innumerables experimentos en el espacio exterior y transportaron partes para la construcción de la Estación Espacial Internacional. El programa STS concluyó en el 2011 con la última misión del transbordador Atlantis.

Sin embargo, el OV-102 Columbia tuvo como su última misión a la STS-107, que inició el 16 de enero del 2003. Durante el lanzamiento, un fragmento de espuma de poliuretano de aproximadamente un kilogramo de peso se desprendió del tanque externo y golpeó la parte inferior del ala izquierda del orbitador. Este impacto, que debió haber tenido una fuerza de una tonelada, dañó el escudo térmico del vehículo, lo que originó la explosión del Columbia a su regreso a la Tierra, el uno de febrero del mismo año… y así, la luz se ha hecho.