Sector patronal de Alemania propone jubilación hasta los 70 años

Sindicatos y políticos de izquierda de Alemania reaccionaron con indignación a la propuesta de elevar la edad de jubilación a los 70 años planteada por el presidente de la patronal metalúrgica Gesamtmetall, Stefan Wolf.

En una entrevista publicada por los periódicos del grupo Funke, Wolf se pronunció a favor de una vida laboral más larga, alegando, entre otras razones, el envejecimiento de la sociedad. “Si se observa la evolución demográfica y las cargas de la seguridad social y los fondos de pensiones, las reservas están agotadas. Tendremos que trabajar más y durante más tiempo”, dijo Wolf.

“Poco a poco tendremos que llegar a la edad de jubilación de 70 años, también porque la expectativa de vida sigue aumentando”. De lo contrario, señaló, el sistema dejará de ser viable desde el punto de financiero en el mediano plazo.

Sindicatos muestran su rechazo
Los representantes de la Confederación Alemana de Sindicatos (DGB) y los sindicatos IG Bau e IG Metall rechazaron la propuesta.

Anja Piel, miembro de la junta directiva de la DGB, dijo que la propuesta no era “más que un recorte de pensiones con una promesa”.

Muchos trabajadores ya no pueden “aguantar hasta la jubilación con buena salud”, argumentó la líder sindical. “Para los que trabajan en la asistencia de enfermos o ancianos, la construcción o las fábricas, trabajar más tiempo no es una opción”, sostuvo.

Además dijo que los que trabajan mucho tienen una “esperanza de vida significativamente menor” y, por tanto, reciben pensiones durante periodos más cortos. Incluso con una sociedad envejecida, apuntó la sindicalista, el gobierno federal tiene la responsabilidad de “establecer una pensión buena y suficiente como promesa de seguridad”.

Piden replicar el modelo austriaco
La presidenta de la organización social VdK, Verena Bentele, propuso dotar al seguro de pensiones obligatorio de una base financiera más sólida. “En lugar de plantearse aumentar aún más la edad de jubilación, debemos reforzar el seguro de pensiones obligatorio. Es decir: a largo plazo deben cotizar no solo los empleados, sino también los funcionarios, los autónomos y los políticos”, demandó Bentele.

La titular de esta asociación que representa los intereses de los más desprotegidos opinó que esta “pensión para todos” reforzaría el sistema y conduciría a una mayor justicia. Destacó que esto ocurre en Austria desde hace mucho tiempo.

En Alemania, el límite de edad para la jubilación sin deducciones se elevará gradualmente de los 65 a los 67 años hasta 2029. El ministro alemán de Trabajo, Hubertus Heil, rechazó un nuevo aumento. “Hemos acordado en la coalición que no aumentaremos la edad legal de jubilación. Y eso no va a cambiar”, replicó.

En tanto, Robert Feiger, presidente del sindicato de la construcción IG-Bau, acusó a los empresarios metalúrgicos de crear una nueva “clase de pobreza de la tercera edad” entre los artesanos y los obreros industriales.

Dietmar Bartsch, líder del grupo parlamentario de La Izquierda, también reaccionó indignado. “Propuestas como las jubilaciones a los 70 años o la semana de 42 horas son patrañas antisociales”, dijo Bartsch a los diarios del grupo Redaktionsnetzwerk Deutschland. En esta situación excepcional con precios disparados, las asociaciones de empresarios tendrían que cumplir con su responsabilidad social, demandó. “No se debe jugar con la paz social”.

Bartsch también se refirió al ejemplo de Austria. “En lugar de que las pensiones se paguen a partir de los 70 años, todos los ciudadanos cotizan, incluidos los políticos y los directivos”, dijo el político de izquierda. “En Austria, la jubilación media es 800 euros más alta que en este país y se paga a partir de los 65 años. Lo que puede hacer Austria, también debe poder hacerlo Alemania”, subrayó.

La Jornada