Hablar de arte feminista es como cruzar una calle de doble vía, nos encontraremos con sentimientos que nos atraviesan que nos incomodan, que nos abrazan o trastocan dolores olvidados.
La obra de Natali Olac- Farfan nos abraza, nos reconforta, pero nos cuestiona qué tan sumidas y acostumbradas estamos al dolor.
Ella se cuestiona su propio existir, su propia corporalidad y como ella nos dice -“aprendí que la palabra gorda no me define, que sólo es un atributo más de mi persona. Le quite la carga despectiva a la palabra gorda” – (Herramientas para Cuerpos en Resistencia. Bulle, Erika, Cuerpa).
Es así como ella, a partir de ese recorrido con su interior, trastoca dolores aprendidos, los reflexiona y nos cuestiona de porque no reír.
¿Por qué dejamos de jugar? Observa que una de las herramientas trasgresoras para nosotras las mujeres es la felicidad, trabajar a través de la risa, del goce, del disfrute y descontextualizar la forma que el patriarcado nos ha enseñado a mirarnos.
Crea su compañera T-rexa, esta dinosauria que su punto primordial es “extinguir el patriarcado”.
Juguetona, divertida y traviesa, nos hace reflexionar sobre cuestionamientos patriarcales que nos han marcado por años.
Es así como T-rexa, nos motiva a reír desde nuestros feminismos y usar la risa como arma de trasgresión patriarcal. Hoy, ella nos acompaña en este recorrido por la obra de Natali Olac- Farfan Artista Visual Femenina que desde Querétaro hoy nos visita aquí en @agendamx #NiazulNiRosa
@terexa.art @olacfarf
Wendy Lópex
“Mujer de ella misma”
@yhanza_lopex