Pese a ser el favorito en las encuestas internas de Morena, Omar García Harfuch, exsecretario de Seguridad Ciudadana capitalino, no logró ser designado candidato a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México tras señalamientos en su contra por el caso Ayotzinapa y en medio del apoyo a su contrincante Clara Brugada, quien obtuvo la candidatura por el tema de paridad de género.
El pasado 20 de septiembre, Harfuch anunció formalmente que buscaría contender por la candidatura por la Jefatura del gobierno capitalino en un evento acompañado de sus simpatizantes, en el que presumió sus labores como jefe de la Policía.
“Quiero participar en este proceso y dar continuidad a la construcción de una ciudad en paz y segura, donde el desarrollo económico y de bienestar social sea para todas y todos”, resaltó.
Sin embargo, siete días después volvió a ser involucrado en el caso Ayotzinapa. Alejandro Encinas, ex subsecretario de Derechos Humanos, aseguró que Harfuch fue señalado de participar en las reuniones de autoridades que acordaron la creación de la “verdad histórica” sobre la desaparición de los 43 normalistas ocurrida en 2014.
En respuesta, Harfuch aseguró que en estos encuentros participó como integrante de la División de Gendarmería de la Policía Federal y negó su contribución en la creación de la “verdad histórica”. También acusó que los señalamientos se trataban de un golpeteo político en su contra debido a los tiempos electorales.
Tras los señalamientos, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que “el pueblo” debía decidir si el exsecretario debía ser el candidato. “Si es tan malo Harfuch como se sostiene, el pueblo está muy consciente”, afirmó el pasado 2 de octubre en su conferencia matutina.
Pese a los señalamientos, Harfuch se mantenía arriba en las encuestas con ventaja sobre Brugada. Sin embargo, a finales de octubre se difundió un audio atribuido a Martí Batres, jefe de Gobierno de la Ciudad de México, sobre una supuesta orden para desfavorecer al exjefe de la Policía.
“Tenemos dos semanas para bajar a Omar por el tema de género, hay que seguir creciendo a Clara, y no soltar la campaña contra Omar en redes”, dice supuestamente Batres en el audio.
El jefe de Gobierno capitalino se deslindó del audio y dijo que era totalmente falso e incluso producido con inteligencia artificial.”Nunca he hecho tales afirmaciones”, expresó en sus redes sociales.
Para inicios de noviembre, Harfuch y Brugada se encontraban en un empate técnico en las preferencias de Morena, de acuerdo con una encuesta de Lorena Becerra compartida con Latinus.
Ante el favorecimiento, la alcaldesa con licencia aseguró que no invocaría a la paridad de género para ser la candidata y que dejaría que Morena decidiera.
No obstante, pese a una amplia ventaja en las encuestas finales de Morena, Harfuch fue descartado como candidato para la Jefatura de Gobierno.
Según las encuestas de Morena dadas a conocer ayer, Harfuch obtuvo 40.5% de los votos, mientras que la alcaldesa de Iztapala con licencia obtuvo el 26.7%.
El presidente de Morena, Mario Delgado, aseguró que la designación de Brugada como virtual candidata a la Jefatura de Gobierno fue por el tema de paridad de género, que obliga a los partidos a postular al menos a cinco mujeres en nueve de las gubernaturas que se disputarán el próximo año.
Brugada fue elegida por el tema de paridad aunque Harfuch la aventajaba con 13.8 puntos. Sin embargo, para cumplir con la cuota de género había al menos otras dos aspirantes por las gubernaturas de otros estados que registraron menor diferencia en la preferencia del voto con relación a hombres.
Según los datos de Morena, Sasil de León tenía 1.5 puntos de diferencia con Eduardo Ramírez, quien fue el seleccionado final para Chiapas; en Puebla se designó a Alejandro Armenta en vez de a Claudia Rivera, cuando la diferencia de puntos porcentuales entre ambos fue de 10.4.
Tras el anuncio de la designación de Brugada, los simpatizantes del exjefe de gobierno acusaron que se trató de un fraude y de una imposición, sin embargo, Harfuch aceptó los resultados, felicitó a su contrincante y se comprometió a trabajar en “unidad”.
Latinus
