Llamado urgente al gobernador de Veracruz para frenar los asaltos en la autopista Orizaba-Puebla

En un firme llamado a enfrentar la realidad, el vocero de la Diócesis de Orizaba, Helkyn Enríquez Báez, ha alzado la voz ante las recientes declaraciones del gobernador Cuitláhuac García, quien negó la existencia de continuos asaltos en la autopista 150D Orizaba-Puebla. Enríquez Báez advirtió que desconocer estos hechos no solucionará el problema, sino que es necesario un operativo de seguridad permanente para proteger a las familias y transportistas que transitan por esta peligrosa vía.

“Es preocupante ver cómo se evade la responsabilidad en un momento tan crucial. A medida que nos acercamos al final del mandato, las promesas de protección parecen desvanecerse, mientras que la violencia sigue acechando a nuestros ciudadanos”, expresó el vocero, subrayando el daño no solo económico, sino también emocional que sufren las víctimas de estos delitos.

El caso más reciente es el de la activista Araceli Salcedo, quien junto a su familia fue despojada de su camioneta bajo amenaza de armas en las Cumbres de Maltrata. Este incidente, junto con otros cinco casos similares ocurridos el mismo día, fue negado por el gobernador, aumentando la preocupación de la comunidad.

La exigencia es clara: dejar de ignorar los problemas y tomar medidas efectivas antes de que sea demasiado tarde. La autopista Orizaba-Puebla sigue siendo un punto crítico, y los ciudadanos piden respuestas y acciones que garanticen su seguridad.