Ken Salazar, embajador de Estados Unidos en México, culminó su gestión tras más de tres años, dejando un legado marcado por la cooperación económica y tensiones políticas en temas sensibles como la crisis del fentanilo y la reforma judicial mexicana.
En su última conferencia de prensa, Salazar aseguró que su estancia en México fue positiva. “No me arrepiento de nada. Me voy satisfecho de haber fortalecido la relación entre nuestros países, consolidando a América del Norte como una potencia económica”, declaró. Durante su gestión, visitó los 32 estados mexicanos en más de 120 ocasiones.
De aliados a tensiones
Aunque comenzó con una relación cercana al presidente Andrés Manuel López Obrador, los roces no tardaron en surgir. Washington cuestionó la reforma judicial mexicana, que busca la elección popular de jueces, y la producción de fentanilo, un problema que ha causado una crisis de salud pública en Estados Unidos.
“Sabemos que hay fentanilo en México y que también se produce aquí. Este debate no nos llevará a la solución que necesitamos”, afirmó Salazar, instando a México a mantener la cooperación en la materia.
Un cambio de era con Trump
El presidente electo Donald Trump asumirá el cargo el próximo 20 de enero, y ya ha nominado al coronel retirado Ronald Johnson como su candidato a embajador en México. Mientras tanto, Mark Johnson fungirá como encargado de negocios.
Trump ha prometido endurecer las políticas migratorias, incluyendo deportaciones masivas, lo que genera temor entre los 11 millones de migrantes indocumentados en Estados Unidos, de los cuales aproximadamente la mitad son mexicanos.
Sheinbaum propone un frente regional ante la migración
Ante este panorama, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha propuesto una reunión regional con ministros de Exteriores de América Latina para abordar los retos de la migración. También reiteró su disposición para recibir a los mexicanos deportados y pidió a Estados Unidos repatriar a los migrantes a sus países de origen, evitando expulsiones masivas hacia México.
La salida de Salazar marca el fin de una etapa de avances y desafíos para la relación entre México y Estados Unidos, con un futuro incierto bajo la administración Trump.
¡Gracias por ser parte de la Experiencia de la Libertad con la comunidad de Agendamx!
¡Visita y suscríbete a nuestro canal en Youtube, dando click a la imagen!





