La administración de Claudia Sheinbaum enfrenta su primer cambio en el gabinete con la sorpresiva renuncia de Rogelio Ramírez de la O como secretario de Hacienda y Crédito Público, apenas cinco meses después del arranque del nuevo gobierno.
La noticia sacudió al ámbito político y financiero, pues el expresidente Andrés Manuel López Obrador había garantizado su permanencia para dar confianza a los mercados, especialmente ante la polémica reforma judicial que mantiene en vilo a los inversionistas.
Fuentes cercanas a la presidencia señalan que Edgar Amador Zamora, actual subsecretario de Hacienda, asumirá el cargo. Amador cuenta con una sólida trayectoria en finanzas públicas, aunque no posee el peso mediático ni la cercanía con el sector privado que caracterizaba a Ramírez de la O.
El anuncio de la salida del secretario ocurre en un contexto delicado, luego de que la virtual presidenta confirmara su permanencia el pasado 3 de junio tras el desplome del peso y la incertidumbre generada por los planes de reformas constitucionales de Morena.
Ramírez de la O, reconocido por su experiencia como consultor financiero para las principales empresas mexicanas e internacionales, había sido una pieza clave para mantener la confianza de los mercados. Su dimisión deja preguntas abiertas sobre la estabilidad económica y la dirección de las políticas financieras del nuevo gobierno.
La expectativa ahora se centra en cómo reaccionarán los mercados ante este cambio y si el nuevo titular será capaz de mantener la estabilidad en un escenario marcado por la incertidumbre y las reformas impulsadas desde Palacio Nacional.
