Eduardo Vázquez Reyes
Buscar que florezcan los recuerdos, impulsando el fomento a la preservación y cuidado de la naturaleza y lograr una resignificación, es decir, una nueva forma de asimilar la pérdida, el duelo y la muerte son los objetivos principales de la iniciativa medioambiental “Bosque de Vida”, primer panteón ecológico del estado de Veracruz y el primero a nivel nacional en implementar el sistema de trascendencia forestal.
Un proceso eco-tanatológico es la estrategia que en Bosque de Vida se ha desarrollado para lograr estos objetivos. Las personas que atraviesan por la experiencia de pérdida de algún ser querido tienen una atención emocional y psicoafectiva, la cual permite en ellos un procedimiento de duelo más sensible, más llevadero. Existe, desde este nuevo enfoque, una estrecha relación entre los dolientes y el crecimiento de una nueva vida, pues los restos humanos son incinerados en una urna 100% ecológica para convertirse posteriormente en la germinación de un árbol, generando un nuevo ecosistema, de acuerdo con Fernando Olivares, director general.
“Todo esto, en el proceso de duelo ayuda a aligerar la carga de emociones que se atraviesan en las siete etapas del mismo y que el fin último es llegar a la aceptación. Nos brinda una manera completamente diferente de despedir y de recordar a quienes han partido, plasmando su esencia en un árbol, en una especie endémica del bosque de niebla”.
Bosque de Vida está ubicado en el corazón del Bosque mesófilo de la región Xalapa-Coatepec, en la localidad de “La Herradura”, específicamente en el kilómetro 3.5 del camino a Cinco Palos. De acurdo con la información de Bosque de Vida, “la altura de la zona hace que las condiciones climatológicas logren que abunden las lluvias frecuentes, neblina y humedad relativa alta todo el año, lo que lo convierte en una zona ideal, que en algunos años se convertirá en una adición al hermoso bosque de niebla que rodea la región”.
El plan de trascendencia forestal implementado en esta iniciativa es parte de un programa de reforestación mediante el cual se pretende lograr la inserción de miles de especies arbóreas en su primera etapa para que estas se reintegren al Bosque mesófilo de montaña que rodea la zona. Así, la generación de ecosistemas será aún más viable para una cultura funeraria verde con un compromiso por el cuidado al medio ambiente.
“Lo que buscamos es que florezcan los recuerdos, que cuando vengamos podamos visitar a un ser vivo muy muy importante en nuestras vidas, que de esta forma la sociedad tenga otras maneras, otros lugares de exposición final de nuestros difuntos, preservando la naturaleza, generando un nuevo ecosistema”.
Como parte de las actividades culturales de la organización de Bosque de Vida, el próximo 1 y 2 de noviembre se llevará a cabo el “Festival de Día de Muertos”, en el Bosque mesófilo de montaña. Hierba Mala, agrupación musical de rock-folk, abrirá el evento. Se presentará la charla “Acercamiento con la muerte en un entrono natural”, que será dictada por Azucena Martínez, psicóloga y tanatóloga. Alicia Colot, filósofa y evaluadora nacional, impartirá la platica “Las leyendas del Mictlán.
