Mauricio Merino Huerta, profesor del Colegio de México (Colmex), afirmó que siente pena por las personas que plagian una obra, situación que le ocurrió con Manuel Bartlett, titular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), y ahora con Ernestina Godoy, fiscal general de la Ciudad de México.
“Plagiar es el peor de los males académicos, es una falta que un docente debe aceptar nunca, eso sin duda, y políticamente para mí, significa poca cosa”, dijo en entrevista con Latinus.
“Es éticamente reprobable, académicamente inaceptable, yo como académico, cuando veo que mis alumnos plagian, los repruebo sin alegato posible”, añadió.
Merino Huerta reconoció que el escritor y periodista Guillermo Sheridan, “se ha venido especializando en la búsqueda de plagios con mucho éxito”, luego de que diera a conocer en Latinus que Ernestina Godoy, fiscal general de la Ciudad de México, copió una de sus obras, sin darle crédito.
“Yo le tengo mucho respeto intelectual y afecto personal a Guillermo Sheridan, no he visto la tesis de la fiscal, tendría yo que ver el material, y cotejarlo con mis propios ojos, cosa que de verdad no he hecho, y, por otro lado, no sé si tengo ganas de hacerlo”, dijo.
El también doctor en Ciencia política y Sociología por la Universidad Complutense de Madrid consideró que la fiscal Godoy, “tiene que responder frente a eso. Confieso que cuando lo leí, me quedé pensando en cuál debe ser la reacción de una persona que ha sido plagiada”.
“A mí, me han plagiado infortunada ante muchas veces, no es la primera vez, me ha sucedido varias veces”, destacó.
Merino Huerta recordó que cuando Manuel Bartlett fue gobernador de Puebla (1993–1999), lo buscó para preguntarle sobre “Fuera del centro”, obra que había publicado en 1992.
“Bartlett me hizo una llamada muy rara, porque yo no lo conocía, para preguntarme si era el autor de ese libro. Me dijo que le había gustado mucho”, confió.
El académico dijo que lo que llamó su atención, “fue la llamada, no sabía para qué, y yo le dije, pues, gobernador, muchas gracias”.
“Días después leí en los titulares de la prensa que había leído un discurso un 5 de febrero, que es cuando se habla del federalismo, en la época del PRI cuando se hacían discursos a nombre de los tres poderes en ceremonias muy pomposas”.
Resaltó que cuando leyó el discurso, “al principio me gustó mucho y después entendí que me gustaba porque eran mis ideas”, apuntó y brotó nuevamente la carcajada.
“Unas literales, otras, parafraseadas de ‘Fuera del centro’. En este caso, fue para un discurso, no para una tesis, me ha pasado muchas veces”, reconoció.
Sobre la copia sin crédito a algún autor, dijo: “me da pena la persona que plagia, porque no tuvo ni siquiera el cuidado, el tacto, el gesto más elemental de poner comillas”.
“El libro que dicen que plagió esta señora… cómo se llama, se me olvidó el nombre de la fiscal”, preguntó.
“Sí, Ernestina Godoy, pues es un bucle, es un cuaderno del Instituto Federal Electoral que publiqué hace casi 30 años, literalmente y que ahora reedita el Instituto Nacional Electoral, al que cedí los derechos, por lo que hay daño económico”, recordó.
Merino Huerta celebró “que haya leído mi libro, lo que no celebro es que no hayan utilizado ‘Gato por liebre’, que es el libro que acabo de publicar, porque eso ayudaría a que se vendiera mejor”, comentó para soltar otra carcajada.
Se le pidieron más nombres de funcionarios de la llamada cuarta transformación que han plagiado su obra, a lo que respondió: “pregúntele usted a Sheridan”, remató.
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