Un hecho bochornoso se produjo este jueves en el municipio de Córdoba, Veracruz, durante un evento de la candidata a la gubernatura por la coalición “Sigamos Haciendo Historia por Veracruz”, Rocío Nahle García. Miembros del equipo de campaña de Nahle agredieron física y verbalmente a periodistas que cubrían el evento, impidiéndoles acercarse a la candidata para realizar su trabajo.
Las agresiones quedaron registradas en videos que circulan en redes sociales, donde se observa cómo integrantes del equipo de Nahle forman una valla humana para impedir el paso de los periodistas. Luego, los empujan, jalonean e incluso intentan desalojarlos del lugar. En un momento, un elemento de seguridad amenaza a un reportero que intenta cuestionar a la candidata.
Este lamentable hecho ha generado una ola de críticas hacia Rocío Nahle y su equipo, quienes han sido acusados de falta de respeto a la libertad de expresión y de agresión a la prensa. La situación se agrava aún más al producirse en el contexto de una denuncia por corrupción presentada contra Nahle y su esposo, José Luis Peña, por parte del empresario Arturo Castagné.
La agresión a los periodistas por parte del equipo de Rocío Nahle es un acto deplorable que atenta contra la libertad de prensa y el derecho a la información. Es inaceptable que una candidata al gobierno de un estado incurra en este tipo de prácticas autoritarias, buscando silenciar a la prensa crítica.
Las imágenes de las agresiones son contundentes y no dejan lugar a dudas sobre la responsabilidad del equipo de Nahle. Es fundamental que las autoridades investiguen a fondo este caso y que se sancione a los responsables de las agresiones.
Asimismo, es necesario que Rocío Nahle se pronuncie públicamente sobre este hecho y condene las acciones de su equipo. La candidata debe demostrar su compromiso con la libertad de expresión y el respeto al trabajo de la prensa.
Este tipo de actos no deben quedar impunes. La sociedad veracruzana y la comunidad periodística en general deben exigir justicia y garantías para el ejercicio libre de la prensa. La libertad de expresión es un pilar fundamental de la democracia y no puede ser vulnerada de ninguna manera.
