IP y gobierno definen blindaje para evitar paneles

A unos días que entre en vigor el Tratado México, Estados Unidos, Canadá (T-MEC), el gobierno de México y el sector empresarial definen herramientas laborales para “blindarse” contra cualquier demanda que provenga de Estados Unidos o Canadá, por supuesto incumplimientos en libertad sindical o trabajo forzoso.

A través de la videoconferencia titulada “Estrategias para la prevención y la atención de riesgos laborales ante la implementación del T-MEC”, Carlos Salazar, presidente del CCE informó que desde hace dos meses se estableció un comité de trabajo para llevar una “actitud preventiva” frente a cualquier situación relacionada con la legislación laboral. El subsecretario del Trabajo, Alfredo Domínguez Marrufo, advirtió que, para evitar afectaciones en materia laboral, los empresarios deberán coadyuvar a la libertad sindical. Abundó que la herramienta de autoevaluación en materia de libertad sindical para el sector empleador será un instrumento que permita identificar las obligaciones y cumplir, para evitar sanciones.

Domínguez alertó a los empresarios, que cualquier acto que pretenda impedir que se constituya o se organice un sindicato, el presionar de cualquier forma o inducir a los trabajadores para que se afilien o retiren de cualquier sindicato, se considera como presión.

Herminio Blanco, asesor para la implementación del T-MEC por parte del sector privado, dijo que aun cuando se concentran los comentarios en torno a las posibles controversias con EU, también, dijo, habrá que estar al pendiente de Canadá, pues las relaciones de los sindicatos de las empresas son muy cercanas, y en algunos casos son los mismos gremios. Además de la existencia de una lista del departamento del Trabajo de EU sobre los derechos de trabajo forzoso e infantil. Así como el departamento de aduanas estadounidense, quien tiene capacidad por ley, de imponer un embargo.

El Economista