Mayoría de tribunal brasileño vota por prohibir que Bolsonaro ocupe cargos públicos hasta 2030

El máximo tribunal electoral de Brasil votó mayoritariamente a favor de prohibir que el expresidente Jair Bolsonaro ejerza cargos públicos hasta 2030, por acusaciones de que el nacionalista de extrema derecha abusó de su poder en las tensas elecciones del año pasado.

La carrera política del expresidente brasileño Jair Bolsonaro se desplomó este viernes, después de que los jueces del Tribunal Electoral Federal (TSE) votaron a favor de prohibirle ejercer cargos públicos hasta 2030 por su conducta durante las tensas elecciones del año pasado.

Cinco de los siete jueces votaron a favor de condenar a Bolsonaro por abuso de poder y uso indebido de los medios de comunicación el año pasado, cuando convocó a embajadores para ventilar afirmaciones infundadas sobre el sistema de votación electrónica de Brasil.

Bolsonaro, excapitán del ejército que perdió las elecciones de octubre por un estrecho margen frente a su rival izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva, está acusado de crear un movimiento nacional para anular el resultado, que culminó con la invasión de edificios gubernamentales en Brasilia por miles de sus partidarios el 8 de enero.

El juez principal del caso, Benedito Goncalves, votó a principios de esta semana para que no se le pueda elegir durante ocho años, diciendo que había “usado la reunión con los embajadores para difundir dudas e incitar a las teorías de la conspiración”.

Bolsonaro niega cualquier delito y ya ha dicho que planea apelar ante el Tribunal Supremo.

No he atacado el sistema de votación, sólo mostré sus posibles fallas”, dijo Bolsonaro en una entrevista con la emisora de radio Itatiaia el viernes, antes del juicio. “Este juicio no tiene ningún sentido”.

Admirador declarado del expresidente estadounidense Donald Trump, Bolsonaro fue criticado a nivel internacional por su mediocre administración de la selva amazónica, su enfoque de “laissez-faire” en las restricciones del Covid-19 y sus ataques sin pruebas al sistema electoral de Brasil.

El juicio del TSE forma parte de un ajuste de cuentas más amplio en Brasil por las consecuencias de las elecciones más dolorosas del país en una generación.

Mientras el expresidente se enfrenta al escrutinio del tribunal electoral, muchos de sus antiguos aliados están siendo interrogados por los legisladores en una investigación del Congreso sobre los disturbios del 8 de enero.

Bolsonaro no corre el riesgo de ir a la cárcel en el caso electoral, aunque a sus 68 años se enfrenta a otras investigaciones penales que aún podrían ponerle tras las rejas.

El Economista